Redegal, agencia Google Partner Premier 2024
La web habla de la marca por sí sola, es un reflejo de lo que la marca es y lo que el usuario percibe de ella. A lo largo del día la página web se llena de cientos o miles de visitas, un tráfico bastante complicado de controlar y de llevar a nuestro propio terreno. Para ello, es necesario contar con herramientas como los mapas de calor, un recurso que nos permite conocer más al usuario, saber qué es lo que le gusta y a qué le dedica más tiempo, sin olvidar que la experiencia del usuario dentro del entorno online es primordial.
¿Qué es un mapa de calor web?
Se trata de una representación gráfica en la que se emplean distintos colores para indicar las distintas partes de la página web en las que los usuarios realizan más interacciones, los sitios en los que el navegante hace clic, las partes que se leen y las que se pasan por encima… Es una forma de controlar la actividad del usuario con el objetivo de ofrecer una mejor experiencia en el entorno digital ya que de esta forma se obtienen datos estadísticos que permiten perfeccionar el sitio web haciéndolo más fácilmente navegable.
Los diferentes tipos de mapas de calor según la necesidad
Existen distintos tipos de mapas de calor o heatmaps según las necesidades específicas que se busquen obtener. Cada mapa es diferente y la elección entre uno u otro se realiza en función de la información que se busque obtener. Entre los más empleados destacan:
- Mapa de clics: se pasa a conocer en qué partes de la web hacen más clics los usuarios, lo que permite poner más atención a las partes que generan más tráfico con el fin de evitar posibles fugas de conversiones. Este tipo de mapas es bastante fiable ya que recoge acciones voluntarias del usuario.
- Mapa de movimiento de ratón: detecta el movimiento de ratón del usuario dentro de la web, aunque este tipo de mapas son más difíciles de analizar y cuenta con ciertas limitaciones, para obtener datos fiables conviene contrarrestar con otras fuentes, como son las herramientas de analítica web como Google Analytics o con otros mapas de calor.
- Mapa de scroll o desplazamiento vertical: te permite saber hasta dónde lee el usuario, en qué partes se detiene y las que pasa por encima. Esto te ofrece la posibilidad de adaptar el texto según la actividad del visitante, identificar zonas de escaso interés y plantearse un cambio en la estructura de la web.
Objetivos principales de los mapas de calor
Estos son algunos de los objetivos y beneficios que trae consigo el empleo de los mapas de calor para tu página web:
- Detectar fallos en nuestra web: nos puede orientar a la hora de enmarcar la estructura de la página, la forma de disponer los gráficos, imágenes, si la combinación imagen-texto funciona correctamente…
- Medir los sitios idóneos para incluir la publicidad: nos orienta a la hora de ver en qué sitio debemos incluir anuncios debido al tráfico que generan. Pero hay que tener cuidado de no incluir publicidad en los lugares de más atención ya que esto restaría protagonismo al el propio contenido de la web.
- Conocer los espacios más visibles de nuestra web: nos ofrecen toda la información que necesitamos conocer para saber qué contenido y qué elementos debemos incluir, en qué lugares deben aparecer para tener más visibilidad… De esta forma llegamos a comprender la interacción del usuario y conocemos dónde centra su atención.
- Medir la distancia que recorren los usuarios: concretamente los mapas de movimiento permiten observar hasta qué punto visualizan los usuarios la página, pudiendo llegar a determinar la longitud óptima de la página y el grado de interés en el sitio web. Estos mapas pueden proporcionar información de hasta qué punto los usuarios examinan el contenido y abandonan el site.
- Optimizar la tasa de conversión: Los mapas de calor ayudan a entender cómo interactúan los usuarios con la web de modo que pueden resolver respuestas a preguntas críticas de negocio. Una solución para aumentar la tasa de conversión podría ser rediseñar la página para que el contenido esté más organizado y estructurado, dando pie a seguir navegando en ella. Así también, podría optarse por mover los CTA por encima del pliegue y facilitar la interacción con la interfaz.
Herramientas para hacer un mapa de calor
Estos mapas emplean un esquema de colores estandarizado. Las zonas que menos visitas tienen (las denominadas frías) se encuentran marcadas con el color verde o azul, mientras que las más calientes pueden venir representadas con el color rojo, naranja o amarillo.
Lo más importante de estos mapas es aplicarlos durante un tiempo determinado, ya que de esta forma se podrán obtener datos relevantes para crear una estadística que aporte valor y mejore la experiencia del usuario dentro de la web. Dentro de las herramientas que se emplean para generarlos se encuentran:
- Crazy Egg: una de las herramientas más utilizadas para crear mapas de calor, también permite realizar tests A/B y proporciona información sobre términos de búsqueda, navegadores y sistemas operativos utilizados.
- Hotjar: herramienta freemium que funciona con las principales plataformas de creación de páginas web y ecommerce. Al ser responsive, se pueden crear mapas de calor independientemente del dispositivo utilizado por los visitantes.
- Mouseflow: rastrea el comportamiento de los usuarios y envía los datos a la plataforma. A la hora de instalarlo se necesita agregar un fragmento de código en la página web.
- Clicktale: otra de las herramientas más populares, se encarga de proporcionar diferentes análisis del tráfico de tu página web en tiempo real. Se encuentra enfocada a páginas web con gran volumen de tráfico.
- Microsoft Clarity: Es una herramienta gratuita lanzada por Microsoft en el año 2021. Se encuentra equipada con una gran gama de características como son su integración con Google Analytics, un procesamiento de datos en tiempo real mediante un panel de control.
Los mapas de calor son muy útiles para detectar esos puntos de mejora en tu página web, aportan información relevante, sobre todo para los ecommerce, desempeñan un papel fundamental en la mejora continua de un sitio web en términos de aumento de las tasas de conversión, usabilidad y una mejor experiencia de usuario.
No obstante, los mapas de calor deben ser analizados conjuntamente con otros datos analíticos. De esta forma, se podrá tener una visión global de la interacción en la página y se podrá averiguar si el contenido que se está produciendo realmente atrae a los usuarios o debe ser modificado.
¿Te gustaría aplicar mapas de calor y realizar mejoras para el usuario? Nuestros equipos de Analítica Digital y Desarrollo web estarán encantados de ayudarte, no dudes en contactarnos 🙂